Entrega 1 del Sistema de Control de la Combustión para el horno cerámico.
Del aire fijo al aire modulado
Cómo la regulación simultánea de aire y gas mejora la eficiencia y estabilidad del proceso de cocción. En el Sistema de Control de la Combustión para el horno cerámico, la calidad de la cocción y la eficiencia energética dependen directamente del equilibrio entre aire y gas en cada quemador. Sin embargo, una gran parte de las instalaciones aún opera con sistemas de aire fijo, en los que el caudal de aire permanece constante mientras solo el gas se modula. Esta configuración simplifica la operación pero limita la precisión del proceso, reduce el aprovechamiento energético y aumenta la variabilidad térmica dentro del horno.
El Sistema de Control de la Combustión (SCC) nace precisamente para superar estas limitaciones. Su función principal es convertir un quemador que trabaja con aire fijo en un quemador de aire modulado, permitiendo adaptar la mezcla aire/gas en tiempo real y en función de las condiciones del proceso.
¿Por qué evolucionar el control de combustión?
- Los sistemas de aire fijo presentan limitaciones intrínsecas:
- Incapacidad para compensar cambios ambientales (temperatura, densidad, presión del aire).
- Mayor consumo específico de gas, al trabajar frecuentemente con mezclas no optimizadas.
- Variabilidad en la atmósfera del horno, afectando la repetitividad del proceso de control de la combustión para el horno cerámico.
- Riesgo de desviaciones térmicas que impactan en la calidad final del producto.
Con la creciente demanda de eficiencia energética y estabilidad térmica, evolucionar hacia un control modulado no es solo una mejora técnica: es un requisito operacional relacionado directamente con el Sistema de Control de la Combustión para el horno cerámico.
¿Qué es el SCC?
El SCC es un dispositivo electrónico de control avanzado que integra un transductor certificado de presión de gas y un transductor interno de presión de aire totalmente integrado en su electrónica.
A partir de estas señales, el sistema actúa sobre una válvula externa de regulación de aire, permitiendo que el quemador pase de operar con un caudal fijo a hacerlo con aire modulado, ajustado en tiempo real según la demanda térmica y la potencia requerida. El Sistema de Control de la Combustión para el horno cerámico asegura este ajuste óptimo.
¿Cómo actúa?
El funcionamiento del SCC se basa en tres pilares técnicos:
- Control automático de la válvula de aire: el sistema regula la presión del aire suministrado al quemador, compensando automáticamente variaciones en la densidad o temperatura del aire. Esta corrección continua mantiene una mezcla estable y eficiente dentro del contexto del Sistema de Control de la Combustión para el horno cerámico.
- Ajuste continuo de la relación aire/gas: el SCC calcula y adapta la mezcla en tiempo real, asegurando que la relación estequiométrica se mantenga constante en todo el rango de potencia del quemador. Esto garantiza una combustión más uniforme y controlada.
- Histórico técnico por modelo de producción: el sistema registra de forma automática el histórico de ajustes realizados por cada quemador. Esto permite reproducir con precisión las mismas condiciones cada vez que la fábrica trabaja con un modelo de azulejo, formato o curva de cocción determinado.
Este punto es especialmente valioso para plantas que manejan múltiples curvas y requieren repetitividad absoluta entre lotes.
Resultados
El uso del SCC permite alcanzar una relación estequiométrica óptima por modelo, formato o curva del horno, mayor eficiencia energética, al reducir el exceso de aire y mejorar el aprovechamiento del gas, estabilidad térmica, con menor dispersión entre ciclos y quemadores y reducción del consumo de combustible y del desgaste térmico.
En conjunto, el SCC se consolida como una solución técnica para conseguir procesos de cocción más estables, eficientes y reproducibles, adaptándose a las exigencias actuales de la industria cerámica, siendo parte integral del Sistema de Control de la Combustión para el horno cerámico.
